3.- PROFUNDICEMOS EN EL TEMA.
Las bacterias, entre otros se alimentan también de nematodos
muertos y el número de bacterias se incrementa con una tremenda rapidez.
Las primitivas amebas están emergiendo en el frente y fagocitando
bacterias.
La ameba se aproxima cerca de sus víctimas envolviéndolas.
Las bacterias son fagocitadas pero no sucumben inmediatamente. Algunas
de ellas continúan todavía moviéndose dentro del cuerpo de su depredador.
¿Tendrá esta ameba como objetivo a la materia orgánica coloreada
de anaranjado?
No ella la atraviesa y ataca a un grupo de microorganismos.
Estos son fagocitados ablandado lentamente y finalmente digeridos
dentro de la ameba.
Pero también llega el momento en el que el cuerpo de la poderosa
ameba se debilita.
Entonces las bacterias que se encuentran cerca aumentan en
cantidad.
Esta es una lucha por la supervivencia en un invisible mundo
subterráneo donde un evidente ecosistema impide el crecimiento desmedido de
organismos específicos.
Este es un campo en el que sucesivamente se ha cultivado la misma
especie de vegetales todos los años. Grandes cantidades de fertilizantes
químicos sintéticos y de pesticidas son utilizados en este campo.
Con el tiempo se originan bacterias patógenas en el suelo como
resultado de su desequilibrio.
Estudiaremos a continuación la diferencia entre el suelo de este
campo y uno sano.
Se realiza para ello un cultivo en suspensión que consiste en
dispersar tierra del suelo dentro del agua y realizar una comparación de los
microorganismos que aparecen en este estudio.
En el suelo saludable con una cantidad adecuada de materia
orgánica pueden ser observadas varias colonias de microorganismos pero en el
suelo enfermo podemos ver poca variedad de microorganismos.
Aquí una especie de microorganismos se extiende sobre la
superficie de una Placa de Petri.
Aquí observamos un gran crecimiento de las hifas de un Fusarium, especie de hongo
patógeno que se encuentra en el suelo.
El Fusarium se
acerca a los pelos radiculares y penetra en la raíz.
Atacada por el Fusarium la
debilitada raíz queda ahora a merced del ataque de otros microorganismos, como
bacterias y nematodos.
Esto pone fin a la vida del cultivo.
Esta es una plantación de tomate Marchitada por Fusarium.
En la actualidad la enfermedad causada por Fusarium es un serio problema para el cultivo de hortalizas.
Este es un campo de cultivo de col china afectado por la esta enfermedad
de la “Modulación de la raíz”.
Como el mismo cultivo fue realizado repetidamente allí, la
densidad de bacterias patógenas ha aumentado ya que tienen como preferencia
esta especie cultivada.
Durante el invierno la asociación de hongos microscópicos hiberna
en forma de esporas. El mismo cultivo fue realizado allí ya que tienen como
preferencia esta especie cultivada.
Cuando no existían los agroquímicos se habían ideado varias formas
para prevenir las enfermedades en los cultivos.
En algunos distritos de Japón por ejemplo los agricultores
practican los cultivos mixtos plantando conjuntamente cebolla de primavera
melón y poroto.
Hemos encontrado un microorganismo que inhibe el crecimiento de
hongos y que vive en estado de simbiosis en las raíces de la cebolla de
primavera.
Estos son hongos patógenos y microorganismos anti hongos que
crecen en la raíz de la cebolla.
El hongo busca microscópico extiende sus hifas.
El hongo microscópico es envuelto por una gran cantidad de bacterias
anti hongos.
Una gran acumulación de estas bacterias envuelve a los hongos y
detiene su crecimiento.
Estas bacterias son también capaces de digerir a los hongos El
cultivo mixto es una de las medidas de control biológico en el cual se utilizan
microorganismos en lugar de fumigar el suelo.
Este es un suelo que siempre dependió de fertilizantes sintéticos
y agros tóxicos. Como posee poca cantidad de materias orgánicas fue erosionado
fácilmente por la lluvia y el viento.
Este suelo endurecido se transformó en un suelo con poca vida.
Para rehabilitarlo tal vez sea necesario hay que introducirle
compuestos naturales, en cantidades suficientes para la activación de
microorganismos.
Los agricultores han
comenzado a cosechar el té en los campos.
Con una adecuada cantidad de materia orgánica el suelo se torna
saludable conteniendo este un buen equilibrio de nutrientes esenciales, así
como agua y aire en cantidades adecuadas para los cultivos.
El cultivo mantendrá las hojas flores y frutos sanos mientras, el
suelo permanezca vivo y saludable.
En un costado de la estación experimental podemos apreciar un
lugar agradable para que los niños jueguen durante las vacaciones de verano.
Su objetivo son los escarabajos, debajo de los troncos para el
cultivo de hongos Shiitaque, los
escarabajos depositan sus huevos luego de que los hongos han sido recolectados.
Además de los escarabajos existen muchos otros animales macro y
microscópicos, bajo las cámaras de troncos.
La naturaleza está equipada con un sistema de recirculación, el
cual regresa sus propios desechos al suelo con la ayuda de estos
microorganismos.
¿Y que podemos decir con respecto al hombre?.
Desde principios de la década del 50 el hombre ha estado
produciendo muchas cosas no existentes dentro de la naturaleza.
Estos materiales han sido arrojados han sido arrojados, luego de
ser utilizados y el suelo se ha
transformado en un basural.
En la actualidad la basura ha alterado el sistema de recirculación
de la naturaleza.
Los cerezos en la estación de Ojito florecen nuevamente. El
suelo
está lleno de vitalidad, otorgándole vida a los nuevos organismos.
El suelo es
el sostén de muchas criaturas en la naturaleza.
Si el mundo se considera bajo un nivel cósmico, cualquiera
comprenderá que la vida del hombre justamente una de las muchas formas de vida
de la naturaleza.
Varias formas de vida pasan a través del hombre como alimento y
así el hombre crea el suelo.
Para crear condiciones naturales en el campo, se requiere de
misteriosos trabajos de la naturaleza, así como de la dedicación humana.
Una vez que conocemos esta realidad, uno puede seguramente darse
cuenta de cuán importante es promover la práctica de una agricultura
sustentable, que proteja el medio ambiente y produzca alimentos saludables.
La raíz crece vigorosamente dentro de un suelo saludable.
En el suelo de la
agricultura viven, además de las plantas, micro y macroorganismos, tales como
bacterias, algas, hongos, nematodos, lombrices, etc. La biomasa microbiana es
muy relevante, estimándose que puede ascender a unos 1.000-3.000 kg de peso
seco por hectárea, en los primeros 20 cm.
La actividad y población
de estos microorganismos varía en función de la textura del suelo, pH,
temperatura y suministro de agua, oxígeno, carbono y nitrógeno.
4.- LOS MICROORGANISMOS
DEL SUELO EN AGRICULTURA:
Las lombrices, excavan
galerías en el suelo y se alimentan de restos orgánicos descompuestos. Mejoran
la estructura y solubilizan los elementos nutritivos.
Las bacterias intervienen
en las transformaciones que sufre el nitrógeno: amonización, nitrificación y
desnitrificación. Las del género Rhizobium,
que viven en simbiosis con las raíces de las leguminosas,
fijan el nitrógeno
del aire.
Los hongos pueden degradar
compuestos orgánicos muy resistentes y las micorrizas proporcionan, en
simbiosis con las raíces de algunas plantas, un aumento.
Hongos. Bacterias y nematodos.
Los microorganismos también son importantes para la productividad vegetal, son
los seres vivos más abundantes de los suelos y a ellos incumbe la regulación de
los ciclos de la materia orgánica y los nutrientes, la fertilidad y
restablecimiento de los suelos.
Las buenas condiciones
para el crecimiento de las plantas. Más de 90% de las plantas del mundo
desarrollan una asociación simbiótica con uno de los 5 tipos de micorrizas, un
hongo que actúa como extensión natural del sistema radicular de la planta.
Esta asociación aumenta
la capacidad de las plantas de absorber los nutrimentos, las protege contra los
patógenos, y aumenta su tolerancia contra los agentes contaminantes y las
condiciones adversas del suelo, tales como el estrés hídrico, el bajo pH y la
alta temperatura del suelo.
5.- FIJACIÓN BIOLÓGICA
DEL NITRÓGENO (FBN)
La FAO promueve la
fijación biológica del nitrógeno que se logra con la inoculación de bacterias Rhizobium, como medio para
mejorar la
producción de las leguminosas. Los Rhizobium
colonizan las raíces de las plantas y forman nódulos donde se fija el
nitrógeno, que satisface casi el total de las necesidades de las plantas de
este elemento.
Pero, indica el informe de la AGL, "limitan la aplicación
generalizada de esta técnica el uso de fertilizantes nitrogenados, la falta de
incentivos para el cultivo de leguminosas, así como la carencia de incentivos
políticos y económicos adecuados".
Por otra parte, los
resultados varían a menudo- la eficacia de las Rhizobium depende de la calidad de las cepas, así como de
las características del suelo y del sistema de gestión de las cosechas.
Consecuentemente, la
promoción acertada de FBN requiere un esfuerzo sostenido de la investigación y
una implicación activa de los agricultores y de los técnicos.
La función de los
seis géneros de la familia de bacterias Rhizobiaceae
en la producción de leguminosas.
También se utilizan mucho
en las regiones tropicales, sobre todo en Brasil y México, la asociación de
bacterias diazotróficas y endofiticas que no sólo fijan el nitrógeno de la
atmósfera sino que modifican la forma e incrementan el número de pelos
radiculares, ayudando así a las plantas a absorber más elementos nutritivos.
La aplicación de estos
organismos en inoculantes (sobre todo en el maíz, arroz, trigo y caña de
azúcar) ha incrementado la producción agrícola "desde niveles
insignificantes hasta casi el 100 por ciento".
Se han utilizado muchas
especies y géneros de bacterias para favorecer el crecimiento de las plantas.
Las que han dado mejores resultados son Agrobacterium
radiobacter, utilizada para controlar el cáncer bacteriano en numerosas
familias vegetales; Bacilus subtilus,
que elimina la podredumbre de las raíces de los cereales, y diversos bacilos
inoculadores que se usan en China en los cultivos de hortalizas.
La microfauna de los
suelos además desempeña una importante
función en la protección fitosanitaria.
Los nematodos se utilizan con buenos resultados contra una amplia variedad de
plagas de insectos, entre ellos los gusanos blancos, moscas de la fruta y
sírices de la madera.
La experimentación en
invernaderos ha demostrado que los nematodos además son eficaces para combatir
diversos hongos patógenos a las raíces.
Con todo, el informe señala
que la función de los microorganismos de los suelos en la agricultura sigue sin
valorarse adecuadamente.
"El uso excesivo y el mal uso de insumos
externos, como fertilizantes inorgánicos y plaguicidas - conjuntamente con
cultivos especializados o monocultivos - puede propiciar un considerable
incremento en la producción general de alimentos, pero también agotan la
fertilidad y los componentes biológicos del suelo y degradan los elementos
físicos de la tierra.
Hace falta un
planteamiento integral que tome en cuenta las repercusiones potenciales de la
agricultura en la biodiversidad de los suelos, que mantenga la fertilidad de
los suelos, la productividad y la protección de los cultivos, aprovechando al
máximo las sinergias ecológicas entre los diversos elementos biológicos del
ecosistema y mejorando la eficiencia biológica de los procesos que se dan en
los suelos.
Esto sería útil para la
agricultura comercial moderna, y sobre todo en las tierras marginales en vía de
degradación, en las tierras ya degradadas que necesitan saneamiento y en las
regiones donde no es viable una agricultura que requiera abundantes insumos
externos".
Ciertamente, lo que
entendemos hoy por suelo ha sido resultado de la suma de conocimientos que se
han ido adquiriendo a lo largo de los años.
Una de las definiciones
de suelo, relativamente recientes y que me parece interesante, dice así:
”El suelo es la parte más superficial de la
corteza terrestre, con un espesor que varía de unos pocos centímetros a dos a
tres metros, en donde los reinos vegetal y animal establecen una relación
íntima con el reino mineral.
Los vegetales toman del
suelo agua y nutrientes y los animales elaboran su propia materia a costa de
los vegetales. Los residuos de animales y vegetales vuelven al suelo, en donde
la materia orgánica se descompone por la acción de microorganismos para dar de nuevo
los productos originales”.
El suelo es el sistema
básico de todo cultivo.